
Santo Cáliz expuesto en la catedral de Valencia
El viaje extraordinario que hará el Santo Cáliz de Valencia hasta el Pirineo este verano
La reliquia también salió de la basílica metropolitana de la Asunción cuando estuvo custodiada y oculta durante la Guerra Civil para evitar su profanación
La copa del Santo Cáliz es de cornalina oriental, una piedra fina de color rojo oscuro, y se cree que fue labrada en un taller de Egipto, Siria o Palestina en los siglos II-I a.C. Las asas y la base de oro fueron añadidas en el monasterio de San Juan de la Peña en el siglo XIV.
Venerado en la catedral de Valencia desde 1437, realizará una salida extraordinaria en julio hacia Aragón. La reliquia será acogida en el monasterio de San Juan de la Peña y la catedral de Jaca. Esta peregrinación coincide con el 75 aniversario de la Real Hermandad de San Juan de la Peña.

Monasterio San Juan de la Peña
El canónigo celador, Álvaro Almenar, destacó en los medios del arzobispado de Valencia la importancia de este evento como un acto de hermanamiento entre la Comunidad Valenciana y Aragón. El monasterio de San Juan de la Peña, donde la reliquia estuvo custodiada 350 años es considerado un lugar de referencia para los valencianos.
«Contemplar el Santo Cáliz invita a los fieles a tener los mismos sentimientos que Cristo», subraya Almenar. Este acontecimiento se enmarca en el contexto del próximo Año Jubilar del Santo Cáliz, que se abrirá en octubre de 2025 en la archidiócesis de Valencia, el tercero celebrado después de los años 2015 y 2020.
En su recorrido hasta Aragón, la reliquia será trasladada con todas las medidas de seguridad, y será acompañada por canónigos y por miembros de la Cofradía del Santo Cáliz y de la Hermandad.
¿Cómo llegó a España?
El Santo Cáliz llegó a España a través del diácono del Papa Sixto II, quien lo envió a su pueblo natal Loreto, cerca de Huesca. Ante la amenaza de la invasión musulmana, fue trasladado a diferentes lugares del Pirineo Aragonés.
A mediados del siglo XI, fue llevado a Jaca y entregado al monasterio de San Juan de la Peña, donde permaneció durante 350 años. En 1437, el rey Alfonso V «El Magnánimo» lo entregó a la catedral de Valencia, donde se venera hasta la actualidad.
El 8 de noviembre de 1982, el Papa Juan Pablo II celebró la eucaristía con el Santo Cáliz durante su visita a Valencia. Posteriormente, el Papa Benedicto XVI también celebró la eucaristía con la reliquia en 2006. En 2015, el Papa Francisco concedió a Valencia la celebración del Año Jubilar del Santo Cáliz.

Juan Pablo II con el Santo Cáliz durante la eucaristía en la catedral de Valencia
El Santo Cáliz en Carlet
Durante la Guerra Civil Española, el Santo Cáliz fue ocultado para preservarlo de la persecución religiosa llevada a cabo por los republicanos. El canónigo archivero de la catedral de Valencia, Elías Olmo, entregó la reliquia a la feligresa María Sabina Suey, quien la llevó posteriormente a casa de su madre.
El Santo Cáliz estuvo resguardado tras un tabique en el piso superior de la casa de Carlet hasta el 30 de marzo de 1939, cuando fue entregado a la Junta Recuperadora del Tesoro Artístico Nacional y regresó a la catedral de Valencia.

Maria Sabina Suey
Este acto de protección y fe de los habitantes de Carlet es recordado como un testimonio de devoción y valentía en tiempos oscuros. La casa donde estuvo oculto el Santo Cáliz aún se conserva erguida en la calle Mayor y es un lugar de memoria para los fieles que visitan la localidad.