Felipe VI, en el Día de las Fuerzas Armadas
Homenaje a los caídos por España con la canción «La muerte no es el final» en el Día de las Fuerzas Armadas
Se trata de uno de los momentos más emotivos del desfile, obra del sacerdote Cesáreo Gabaráin Azurmendi
Durante el acto en homenaje al Día de las Fuerzas Armadas de este 7 de junio se ha interpretado la canción La muerte no es el final, himno compuesto por el sacerdote Cesáreo Gabaráin Azurmendi. Esta emotiva melodía ha acompañado uno de los momentos más solemnes y conmovedores de la celebración en Santa Cruz de Tenerife, reflejando el respeto profundo hacia quienes dieron su vida por España.
La muerte no es el final se ha consolidado como un símbolo recurrente en actos solemnes como el desfile del 12 de octubre y otras conmemoraciones militares, evocando la memoria y el sacrificio de los soldados españoles. Su melodía ha unido a los presentes en un sentimiento compartido de gratitud y recuerdo, convirtiendo cada interpretación en un instante de profunda solemnidad y recogimiento.
Originalmente concebido como una obra religiosa, este himno ha trascendido sus orígenes para convertirse en un referente de respeto y unidad en los actos militares. Su fuerza y emotividad han logrado conectar a los asistentes en un homenaje colectivo que reconoce el valor y la entrega de las Fuerzas Armadas.
Además del homenaje musical, la celebración ha contado con la participación de más de 3.200 efectivos de las distintas ramas de las Fuerzas Armadas, reafirmando el compromiso y la dedicación hacia la sociedad española. Sin embargo, ha sido la interpretación de La muerte no es el final la que ha protagonizado el momento más sentido y duradero de la jornada.
La muerte no es final
No es el final del camino
Que aunque morimos no somos
Carne de un ciego destino
Tú nos hiciste, tuyos somos
Nuestro destino es vivir
Siendo felices contigo
Sin padecer ni morir
Cuando la pena nos alcanza
Por un hermano perdido
Cuando el adiós dolorido
Busca en la fe su esperanza
En Tu palabra confiamos
Con la certeza que Tú
Ya le has devuelto a la vida
Ya le has llevado a la luz (bis)
Cuando, Señor, resucitaste
Todos vencimos contigo
Nos regalaste la vida
Como en Betania al amigo
Si caminamos a tu lado
No va a faltarnos tu amor
Porque muriendo vivimos
Vida más clara y mejor
