
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz.
Yolanda Díaz culpa al «desarrollismo» de Franco de la España vaciada
La ministra de Trabajo quiere nombrar el día 31 de marzo como Día Europeo de Lucha Contra la Despoblación
Yolanda Díaz se remonta más de 50 años atrás para culpar a Franco de la España vaciada. La ministra de Trabajo y Economía Social no ha dudado en asegurar que el empeño de Franco en el «desarrollismo» le señala como culpable de la despoblación en nuestro país.
La ministra ha aprovechado los problemas que presentan las zonas más vacías del país para asegurar que poner fin a dicha despoblación terminaría con la herencia de Franco, que, asegura, sino seguiría viva. La primera gran medida que plantea Sumar y con la que pretende poner fin al problema es «trabajar con todas las administraciones para declarar el día 31 de marzo como Día Europeo de Lucha Contra la Despoblación», nombramiento que no terminará con la España vaciada pero si ayudará a Díaz a estar más cerca de su empeño en combatir los «planes de Franco».
«Ese fenómeno de la despoblación comenzó a vaciar los pueblos con la política del desarrollismo franquista, cuando se impuso la tecnificación agrícola en el campo y la industrialización de los polos de desarrollo que reclamaba mano de obra para las ciudades», manifiesta Sumar, que asegura que dicha despoblación es consecuencia directa de «un modelo económico basado en la primacía de las industrias extractivas sobre las de transformación, la desposesión industrial, la desposesión del terreno agrícola que atesoran fondos de inversión o el oligopolio eléctrico, la desposesión de los circuitos de distribución y movilidad, la desposesión de los recursos turísticos enfrentándolos a la población con la consiguiente desposesión de la cultura propia y, finalmente, la crisis demográfica».
Sin embargo, parecen olvidar que es esa industria la que ha proporcionado uno de los mayores avances en posesión de empleo y generación de riqueza. El impacto de la industria en la economía es un factor incuestionable. No solo genera empleo directo e indirecto en una amplia gama de sectores, sino que además, la industria tiene un efecto multiplicador. Por cada empleo creado en el sector industrial, se generan múltiples empleos en otros sectores relacionados, como el transporte, los servicios y la investigación.
Este motor de crecimiento no solo se refleja en la creación de puestos de trabajo, sino también en la generación de riqueza y la mejora de la calidad de vida, que se encuentra presente en toda España con la llegada del desarrollo económico, incluyendo las zonas vaciadas.
Las economías con un fuerte tejido industrial tienden a ser más resilientes frente a las crisis económicas y a ofrecer mejores condiciones salariales y laborales para sus ciudadanos. En Castilla y León, ni más ni menos, la industria ha sido la clave para impulsar el desarrollo económico de la región, posicionándola como un referente en sectores como el automotriz, la energía y la agroindustria.